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Derecho al olvido. Definición y concepto.

El derecho al olvido es un principio legal que permite a las personas solicitar la eliminación de información personal en línea que ya no es relevante o que puede ser perjudicial. Este concepto reconoce el derecho de los individuos a controlar su propia información y proteger su privacidad en el mundo digital.

En la era digital, donde la información personal circula rápidamente en internet, el derecho al olvido se ha convertido en un tema de suma importancia. Este principio legal permite a las personas solicitar la eliminación de información personal en línea que ya no es relevante o que puede ser perjudicial para su reputación.

En este contexto, los Abogados especialistas juegan un papel muy importante en la asesoría y defensa de los derechos de privacidad de los individuos en el ciberespacio.

¿Qué es el Derecho al Olvido?

El Derecho de Supresión, también conocido como Derecho al Olvido, es un derecho fundamental que permite a los individuos solicitar la eliminación de sus datos personales por parte del responsable del tratamiento, sin demoras indebidas.

Este derecho puede ser ejercido en diversas circunstancias:

  1. Cuando los datos personales ya no son necesarios para los fines para los que fueron recopilados.
  2. Si el individuo retira su consentimiento para el tratamiento de los datos y no hay otro fundamento legal para dicho tratamiento.
  3. Cuando el individuo se opone al tratamiento y no hay motivos legítimos que prevalezcan sobre su objeción.
  4. Si los datos personales han sido tratados de manera ilícita.
  5. Cuando la supresión de los datos es necesaria para cumplir con una obligación legal.
  6. Si los datos fueron obtenidos en relación con servicios de la sociedad de la información dirigidos directamente a niños.

Es importante destacar que el ejercicio de este derecho puede ser limitado en ciertos casos. Por ejemplo, el derecho al olvido no prevalece cuando el tratamiento de los datos es necesario para el ejercicio del derecho a la libertad de expresión e información, el cumplimiento de obligaciones legales o misiones de interés público, razones de salud pública, fines de archivo, investigación científica o histórica, fines estadísticos, o para la formulación, ejercicio o defensa de reclamaciones.

Orígenes y Evolución

El origen del derecho al olvido tiene sus raíces en Europa, donde se han establecido importantes precedentes legales y casos emblemáticos que han sentado las bases para este principio fundamental en el ámbito digital.

La Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, en su Artículo 7 del año 2000, garantiza el derecho al respeto de la vida privada y familiar, así como el tratamiento justo de los datos personales en el Artículo 8. Estos derechos fueron ampliamente abordados en la Directiva 95/46/EC de la Unión Europea para la protección de datos, que estableció la aplicación de estos principios en la región.

En Alemania, por ejemplo, se reconoce el derecho a la privacidad y a la rehabilitación social, permitiendo a las personas solicitar la eliminación de su nombre de publicaciones y noticias en línea, incluso si la publicación original era legal. Este derecho se basa en casos judiciales significativos que datan de décadas atrás.

Sin embargo, fue un caso español en 2012 el que generó gran parte del debate sobre el derecho al olvido. Un ciudadano español solicitó a Google la eliminación de enlaces a un anuncio de remate de bienes publicado en un diario español en 1998, argumentando que esta información ya no era relevante. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictaminó que los motores de búsqueda son responsables del tratamiento de datos personales y que las personas tienen derecho, en ciertas circunstancias, a solicitar la eliminación de enlaces con información personal sobre ellas.

Este fallo sentó un precedente importante y llevó a que Google recibiera un gran número de solicitudes para eliminar enlaces en los años siguientes. La implementación de este fallo fue detallada por Google en comunicaciones con el Grupo de Trabajo del Artículo 29 sobre Protección de Datos Personales.

Además, otros países europeos, como Francia y España, han tomado medidas para garantizar el derecho al olvido en línea, ordenando a Google la eliminación de enlaces en todos sus sitios web, incluido google.com, en el caso de resultados de búsqueda que afecten la privacidad de las personas.

En octubre de 2015, el Tribunal Supremo de España falló en otro caso sobre el derecho al olvido, estableciendo que los archivos digitales de los medios de comunicación están protegidos por la libertad de información y que las noticias antiguas no pueden ser eliminadas ni modificadas, aunque se puedan implementar protocolos para evitar su indización en motores de búsqueda.

¿Qué hacer si queremos eliminar información pasada?

Sin entrar en consideraciones técnicas o legales sobre las posibilidades que brinda la decisión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) como nos comenta nuestro abogado de cabecera Manuel Hernández de Viches Abogados, es importante comprender qué opciones tiene un ciudadano que desea evitar que información obsoleta sobre su pasado afecte su reputación en los resultados de los motores de búsqueda.

Para el TJUE, los motores de búsqueda como Google, Yahoo o Bing son responsables del tratamiento de datos personales presentes en páginas web publicadas por terceros. Por lo tanto, un ciudadano puede dirigirse a la empresa del buscador y solicitar la eliminación de enlaces que contengan información perjudicial y sin relevancia actual.

Es muy importante aclarar que aunque el motor de búsqueda logre eliminar técnicamente estos enlaces de sus resultados, la información seguirá disponible en internet, aunque no sea accesible a través de búsquedas. Se elimina la visibilidad pero no el contenido. Para que este último desaparezca por completo, el editor original debería eliminarlo de la red.

En caso de que la empresa responsable del buscador ignore la solicitud del ciudadano, este puede recurrir a las autoridades competentes para exigir la eliminación de los enlaces. Sin embargo, el TJUE reconoce que existe un conflicto de intereses entre el derecho del público a acceder a la información y los derechos fundamentales del individuo que solicita el borrado de los enlaces.

Aunque en general prevalecen los derechos del ciudadano, puede haber situaciones en las que el interés público se anteponga, especialmente si la persona en cuestión desempeña un papel relevante en la vida pública.

El futuro del Derecho al Olvido

A medida que la tecnología continúa avanzando y nuestras vidas se vuelven cada vez más digitales, es probable que el derecho al olvido siga siendo un tema candente en el ámbito legal y ético. Se espera que surjan nuevos desafíos y debates en torno a este concepto, especialmente en relación con la inteligencia artificial, el aprendizaje automático y la recopilación masiva de datos.

En última instancia, el derecho al olvido es un recordatorio importante de la necesidad de equilibrar la protección de la privacidad individual con el acceso a la información y la libertad de expresión en la era digital.

Conclusión

En definitiva, el derecho al olvido es un principio legal fundamental que reconoce el derecho de las personas a controlar su propia información en línea.

Surgido en la Unión Europea y extendiéndose a nivel mundial, este concepto plantea importantes cuestiones legales y éticas que seguirán siendo relevantes en el futuro digital.

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